miércoles, 9 de marzo de 2011

El capitalismo destruye el medio ambiente

Pallero Pedro (kaji_77@hotmail.com)

El capitalismo se ha caracterizado en America Latina, y en todo el mundo, por ser un sistema despiadado con el medio ambiente ya que, desde sus inicios, modificó la estructura de la flora y fauna de los lugares desforestando y priorizando el monocultivo para que los países ingresen al mercado mundial. Estos elementos generan procesos de desertificación y la aparición de los desastres naturales como las inundaciones, tornados y sequías producto de la ausencia de los seres que la madre naturaleza puso para controlarlos.

En la época en que el imperialismo monopolista comienza a establecerse con la fusión de grandes compañías en Trust, las cuales controlan las principales actividades económicas como petróleo, acero, químicos, etc., el desinterés por la ecología se hace evidente con la multiplicación de empresas contaminantes y la implantación férrea del monocultivo, además de destruir toda posibilidad de cambio en la forma de obtener energía y de procurar la misma a las fábricas, motores, redes eléctricas que funcionan en base a combustibles fósiles o energía atómica. Esto se debe a que se anula por cuestiones de ganancia medidas que tiendan a apoyar la utilización de energías renovables y la posibilidad de generar casas autosustentables que no dañan el medio ambiente.

Esto lleva a las muestras mas extremas de despreocupación. Por ejemplo, en Estados Unidos la nafta con plomo generó que miles de personas se envenenaran; en América Latina los pesticidas químicos matan o enferman a miles de niños que trabajan en el campo; en Argentina la pastera papel prensa contamina el afluente del río Baradero y las mega mineras que contaminan agua con cianuro y dinamitan montañas enteras.

Situaciones como éstas son cotidianas en la sociedad capitalista. Pero quizá el ejemplo más crudo sea la muerte de un chico de 6 años, producto de su trabajo esclavo donde manejaba agro tóxicos en una granja avícola industrial, Mimosa III, en el partido bonaerense de Exaltación de la Cruz, lo cual le genero cáncer terminal (escenario que pueden llegar a sufrir sus dos hermanos menores que estan en la misma condición).

Además, el fortalecimiento de algunos mercados permitió, en 1970, que Europa alojara en países extranjeros a las empresas contaminantes para así poder mejorar la situación ecológica en su territorio, rescatando ríos fuertemente contaminados, sobre todo de Alemania (como el Rin), Holanda e Inglaterra, mientras que países que hoy son semi colonias sufren los daños producidos por un sistema que no busca cambiar para mejorar el mundo, sino el beneficio de las grandes potencias.

El desinterés por el medio ambiente debido a la priorización de la ganancia por sobre todo lo demás, como la pobreza extrema, la desnutrición infantil, son solo algunos ejemplos que demuestran el capitalismo salvaje que estamos sufriendo.

Por eso es que la única forma de cambiar esta situación es modificando el sistema, generando una segunda independencia de los países semi coloniales contra el imperialismo, una economía planificada, un sistema que busque el bienestar de toda la sociedad y por lo tanto, intente modificar el daño ambiental disminuyéndolo de todos los rincones no solo de los alrededores de los grandes centros.

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