miércoles, 23 de julio de 2008

Globalización y neoliberalismo, dos caras de la misma moneda.

Durante los primeros años de la década del 70 el sistema capitalista se vio sacudido por una crisis financiera que hizo modificar sus objetivos y los métodos de acumulación que utilizaban.
Desde la crisis del 30 hasta la crisis que hicimos mención al comienzo el universo económico estuvo regido por los métodos keynesianos de salvataje del capitalismo, una idea que en síntesis se refería a la intervención del estado en las decisiones tomadas por una nación y en incrementar los ingresos de los trabajadores para así acrecentar la demanda y reavivar el circuito económico. Este entre otros puntos es el que se denomina “demanda efectiva”. Este momento de la economía se llamó “Estado de bienestar”, dado que las clases trabajadores vivieron una época en la cual pudieron obtener beneficios y oportunidades con las que no habían contado hasta el momento.
Las criticas del sector capitalista hacia este modelo no tardaron en llegar, dado que según ellos la participación del estado en la economía solo generaba estancamiento económico, barreras a los flujos de capitales y limitaba los beneficios empresariales.
Es en este punto de la historia donde el mundo se comienza a manejar por ideas y decisiones que se conocieron como neoliberales, las mismas sostenían que para el crecimiento de la economía se necesitaba un libre mercado que sustente el capital, la eliminación de controles y regulaciones de gobiernos, el consumo generado e innecesario y un homogéneo modelo de desarrollo para conformar los intereses de las grandes corporaciones. El neoliberalismo es una forma de organizar la manera de vivir en el mundo, en la cual se absolutiza el mercado y se lo convierte en un todo por el cual se debe generar el fin de todo comportamiento humano inteligente o de organización que lo amenace. Estos ideales económicos deben llevarse en total libertad, sin restricción financiera, laboral, tecnológica, social ni política. Los principios que rigen al neoliberalismo fueron esbozados por los integrantes de las transnacionales con una precisión perversa, casi diabólica, aquí no se valorizan aspectos relacionados con la ética, moral, solidaridad ni la formulación de una organización colectiva. Cada individuo debe echarse a su suerte y girar entorno de decisiones económicas que decidirán su porvenir.
Este seria un pantallaso del mundo neoliberal, su perversión, su falta de valor humano, desinterés por el bienestar del prójimo entre otros tantos aspectos. Lo que hay que tener en cuenta es que en este modelo se desvaloriza al ser humano como un ser pensante que puede enriquecerse cultural, emocional y socialmente, y se lo toma como una maquina que debe acatar ordenes y cumplir objetivos que provienen del ápice estratégico de una organización que solo busca maximizar sus beneficios.
La globalización juega un papel rutilante en este aspecto ya que es a través de ella que se controla y se implementan los métodos liberales en los cuales se empobrece a las naciones vendiéndoles recetas económicas que solo llevan al hambre y a la miseria de los pueblos.
La globalización se refiere al control de las economías mundiales a través de una integración dada por el comercio y los flujos de capital. En el cual se produce una interconexión mundial a través de la comunicación inmediata, se habla de una sociedad cableada interconectada por el desarrollo de las relaciones mundiales.
En la escuela se nos enseña que la globalización es una pintoresca conjunción de desarrollos tecnológicos que le brindan al planeta la “maravilla” de estar constantemente en contacto y con posibilidades de acceder a todos los aspectos de un mundo que se viene abajo junto con las premisas liberales y de “aldea global” capitalista. Para que este “milagro” liberal se lleve acabo debemos abandonar metas de autosuficiencia, y aspirar a ser competitivos en el mercado mundial, atrayendo por este canal a la inversión extranjera sin restricción de entrada, permanencia ni rendición de cuentas a la salida.
Es a través de la globalización y de su monopolización de la información que se busca la estabilidad de las políticas económicas globales, controladas por el F.M.I y el Banco Mundial. Por lo general cuestionar este modelo genera censuras de muchos organismos creados para sostener la mentira que es en si este sistema.
No nos confundamos al hablar de globalización, es esta una teoría cuyo fin es embestir elementos arraigados en las sociedades, civilizaciones o manifestaciones culturales que amenacen el sostén del libre desarrollo y de las decisiones de sus integrantes.
El neoliberalismo y la globalización generaron en los pueblos un vació cultural llevando a sus habitantes hacia un pensamiento homogéneo, insulso y conservador que no conflictúe su porvenir.
Como conclusión me gustaría dejar claro que esta en nosotros seguir permitiendo esta farza que tantos males causo y le causara al mundo.
Invitémonos todos juntos a participar en la idea de un mundo libre de verdad, antiliberal económicamente, donde todos podamos ser realmente libres y sea conducido por decisiones sociales y humanas, donde la cultura, educación, participación y solidaridad sean premisas de vida y pilares para el futuro. Un mundo donde además no seamos controlados por los comportamientos de una economía que no proteja a las masas y naufrague en el mundo como hoy lo hace gracias a la globalización y al neoliberalismo.


Alejandro Miguel

2 comentarios:

Roco dijo...

muy buen blog, hay q hacerlo circular y que se siga sembrando.

Enremolinos dijo...

Me encata este Fanzine me encanta la idea me encantaria participar :)

y este articulo en especial me gusto mucho...

sigan asi :)

adioss